jueves, febrero 23, 2006

Durante el año me es imposible leer novelas, el tiempo no alcanza, y tenía ganas de leer un par de cosas que dejé para este periodo. En particular Diciembre y Febrero.

En fin, tenía ganas de leer a un tal Philp Roth, en particular su último libro "La conjura contra américa", en el cual el ficciona el hecho de que en vez de que Roosvelt hubiese sido reelecto para ser el presidente de estados unidos durante la segunda guerra mundial, el ganador hubiese sido su oponente, Charles Lindberg. El primer piloto que cruzó el atlántico. La particularidad es que este Lindberg fue condecorado por el tercer reich ante esta hazaña, y siempre se especuló ante el hecho de que era nazi (al menos era republicano, o sea, era algo perfectamente sospechable).

El libro parte muy bien y termina muy mal -por ahí me llegó el comentario de que era lo más bajo de Roth-. Ya que en vez de escribir un libro que reflejara las grandes coyunturas políticas de fines de la década del 30, refleja la vida de una familia judía en estados unidos, la cual es discriminada y se discrimina dentro de su propia paranoia. El final me parecio demasiado simple, con un climax que en terminos narrativos asemeja a esa barrera que nunca he podido superar de Sábato en el Informe sobre ciegos de "sobre héroes y tumbas". Simplemente un libro más.

Un mes después cayó en mis manos algo que tenía ganas de leer hace mucho tiempo, más bien alguien. Cuando estaba en segundo año, un compañero se cambio a literatura, el tipo era resimpático y bueno pa la pelota (Juvenal lo había hechado en el último año de los cadetes de la católica, porque le pidió que le tirara la pelota desde un lado de la cancha al otro. Esta tipo lo hizo, y Juvenal entró en ira debido a que tuvo que estirar la pierna... un profesional no puede herrar así). La cosa es que un día nos encontramos y el andaba con un libro de Paul Auster, no recuerdo el libro, pero Auster me quedó sonando. Me dijo que era un muy buen libro y el tipo era buen escritor. Dos años y algo más, al fin leí a Auster, leí "Mr Vértigo"... es la historia de un niño que aprende a volar. Suena a Harry Potter, pero para nada. Filo la trama da como lo mismo (aunque es mejor libro que el de Roth). El tema es que el héroe de el protagonista, Walt "el niño prodigio" es Lindberg...

Entonces, que pasa con este tal Lindberg. No leo novelas durante más de un año, y cuano leo algo el tipo aparece inmediatamente. Es raro.

Esta claro que es de lo menos interesante que he escrito, da igual, tenía ganas de contarlo.

kaiser chiefs - modern way

1 Comments:

Blogger RgDoll said...

Sí, puede ser de lo más fome, pero te apuesto una bolsita de camotes (jaja) que lo pasaste bien escribiendo, y teniendo algo que contar.

11:40 p. m.

 

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