domingo, marzo 11, 2007

5 años después

Nuevamente es el tiempo el que me motiva a escribir, creo que ese es el leimotiv de este blog, el tiempo y sobre cómo pasa el tiempo por mi, por mi vida, por mis cosas, por la gente que conozco, sobre que hace frente a mis relaciones sociales, sobre mis ideas, sobre mi forma de ver el mundo, y bueno, aquí estamos denuevo.

Hace cinco años era el 11 de Marzo del 2002, era mi primer día de universidad. El día anterior había ido al "día de la cultura" en conmemoración de el primer o segundo año del gobierno de Lagos... Sin dudas era más maníatico que hoy, me desperté a la hora de siempre 06:00 am, con la radio, se encendió la radio y sonaba Nicole con "Viaje Infinito" (aun escuchaba la r&p) y me asusté, no me pareció la mejor canción para comenzar la universidad. Si bien entraba a las 10 de la mañana estaba tan ansioso que me fui con mi madre, hice el mismo recorrido de todas las mañanas de colegio (mi hermano iba hasta el colegio), tomé el metro en Pedro de Valdivia y me bajé en Moneda, caminé lo más lentamente posible la distancia entre Moneda y los Héroes, creo que me demoré 20 miuntos, llegué a la universidad. Di un par de vueltas, recorrí el edificio en el cual no había estado, ya a eso de las 9 no me quedó más que sentarme en una banca a esperar, creo que no andaba escuchando música.

Me senté en el patio de Erasmo Escala 1822 o de Almirante Barroso 40, da igual, es el mismo. Me senté en una banca casi al fondo del patio, aún no había casino panóptico, ni techo al fondo. Era un patio pequeño y yo miraba al norte desde mi asiento, detrás mio había un árbol que por la hora de la mañana no me lograba dar sombra. Supongo que leí el diario, "La Hora", el "Publimetro" no me gustaba(gusta). Miraba de reojo a la gente que había a mi alrededor, me preguntaba quiénes serían igual de nuevos que yo, quiénes me mechonearían, quiénes serían mis compañeros. En eso se sentó en frente mio un tipo de mi edad con un intento de barba, unos pantalones negros apretados que terminaban dentro de unos bototos hasta la canilla, usaba una camiseta apretada y tenía un corte punk, creo que mechones largos arriba y rapado abajo. Se sentó en la banca que estaba justamente al frente, se echó hacia atrás puso sus manos en su nuca con forma de comodidad, cruzó pierna izquierda sobre la derecha, respiro... fue casi un suspiro. Luego se echó hacia adelante y sacó un cigarro (si en esa época aun quedaban Life debe haber sido uno, sino belmont). Puso sus dos pies sobre el piso y se reclinó sobre su espalda, sacó un encendedor (o pidió prestado uno, no lo recuerdo bien), encendió su cigarro y continuó mirando a la gente, pero lo hacia desde otro ángulo, no los miraba como yo, no lo hacía de reojo, los miraba derechamente, pero tampoco los miraba derecho, los miraba como punk, desde la esquina de su barrio.

Yo lo miraba a él de reojo, tal como miraba al resto de la gente mientras intentaba resolver el puzzle de la hora (con el paso del semestre y las conversaciones con Valentina me volví un experto). Pensé en su forma de mirar y supuse que sería compañero mio. Para saberlo sólo quedaba dejar pasar el tiempo.

Llegaron las 10, tenia clases, no entendía bien que clase era, mi horario decía que tenía ayudantía de Introducción a la Sociología, subí hasta el tercer piso, a una sala que mira hacia el suroriente, en la actualidad ya no lo posee, pero estoy seguro que ese año el número de la sala era 305 (luego nos enviarían a una sala en el edificio de enfrente por Erasmo Escala). Éramos pocos en la sala, estaba el Punk, había uno rubio con una camisa de leñador y una polera de los miserables (Brian), creo que estaba la Javiera... Esperamos un rato, nadie hablaba con nadie, yo personalmente no me atrevía a mirar demasiado. Pasaron unos 10 minutos y llegó una mujer algo rubia con un acento centroamericano a decirnos que era la coordinadora académica, y que no tendríamos ese curso, que nuestras clases comenzaban el día martes 12, que para tener ayudantía de introducción a la sociología primero debíamos tener clases, y ello sería mañana martes, asique el próximo lunes recién tendríamos ayudantía. Terminó de hablar y nos pusimos de pie, en eso entró una niña atrasada, recuerdo la mochila celeste y no se porqué alguna especie de llavero de la UC. Yo me paré y salí de la sala, no miré hacía atrás ni hablé con nadie, caminé hacia la alameda y cruce la calle por debajo del metro, tomé una micro que subiera por Irarrázabal... no iba a mi casa, pero tampoco me interesa recordar a donde fui (evidentemente lo recuerdo).

El día siguiente fue desagradable, llegué temprano, creo que a las 8:00, tenía clases a las 8:30 y me había bajado del auto a las 7:40 probablemente (mi hermano había llegado a la hora al colegio). Recuerdo que subí hasta el cuarto piso caminando, con calma, llegué y me senté en el descanso a esperar la hora, comenzó a llegar la gente y muchos se saludaban, por lo que conversaban me di cuenta que serían mis compañeros, pero se conocían, ya fuera del verano, del colegio, tenían amigos comunes, algunos eran compañeros de curso y se molestaban por el sobrenombre (a uno hasta el día de hoy lo llamamos por su sobrenombre). Teníamos clases de Introducción a la Economía con Pedro Tejo, fue una lata, una sala no tan grande repleta de gente, a la cual le llegaba el sol todo el rato, entraba casi perpendicularmente porque recién aparecía el sol por santiago. La materia era fome, muchos conversaban aún del verano, hacia mucho calor.... Luego del recreo creo que nos hicieron una pequeña recepción en el patio. Estaba nuevamente la mujer del día anterior, ahí me enteré que se llamaba Elaine, aunque no fui capaz de dilucidar de dónde provenía su acento, creo que tomé jugo de melón tuna, conversé con algunas personas, al rato concí a Stefano, con el tiempo fui congeniando con personas y con otras no... aparecío la Karla, la Cata, el Angel, me enteré que el Punk se llamaba Rodrigo (inclusive supe que le decían Chino y algo tenía que ver con el destino postuniversidad del primer día), conocí a Valentina, a Francisca, Cristóbal, y me demoré como un semestre en unir todos los nn la ombres con todas las caras... incluso con algunos no lo conseguí, se fueron antes de que fuera capaz. Ese fue el 12 de marzo del 2002.

Cinco años después el punk pasó su imagen a su cerebro y desde ahí sigue igual de punk, me di cuenta que el tipo tenía más tezón que nadie, me hice amigo de él, y conversamos cada vez que nos encontramos. Ya no converso con las mismas personas del comienzo, aunque algunas se mantienen, Karla, Catalina, Valentina y Stefano. Justo cinco años despues del primer día de clases despierto pensando en que tengo que seguir preparando las clases... caigo en la cuenta que han pasado exactamente 5 años y que voy a hacer clases en la universidad a la que llegué... me demoré exactamente 5 años y un día... aunque las ganas de hacer clases vinieron cuando estaba en segundo y tenía clases con Delaire. Probablemente vinieron junto a mi primer 7 en la universidad. Entonces me demoré cuatro años, tres años y 10 meses... no lo sé. De todos modos es fuerte, me cuesta verme con 23 años y metido en este proyecto, evidentemente que me llama la atención que me pongo a pensar y me doy cuenta que da para mucho... pero también me he preguntado bastante si no será demasiado, si no iré demasiado rápido, si no estaré envejeciendo apuradamente. Me miro hace cinco años y me miro hoy y se que ha pasado mucha agua bajo el puente, se ha ido el delineador, se han ido los cortes a tijeretazos (algo queda, pero poco) han vuelto los amigos que casi perdí, se ha ido lo que me hacía mal, ha llegado una persona increible a mi vida, dejé de creer que quería cambiar la pobreza, dejé de creer en dios, dejé de ir a misa, dejé de tocar un sol en su primera inversión cada vez que agarraba una guitarra, dejé de tocar guitarra en todos los carretes o paseos o lugares, dejé el reinado del color negro... mucho ha cambiado. Volví a karate, me fui y volví de nuevo, sigo tomando hasta morir pero ahora algo de intencionalidad hay en ello cuando lo hago, disfruto de ir a la universidad y conversar con esas personas que me desagradaron en un principio porque se conocían entre ellos... creo que dejé de ser tan clasista. Ahora me leo los textos enteros, escribo mucho mejor, no uso icq sino msn, mi mail tiene mi nombre o algo relacionado conmigo, he ido a congresos, he escrito cosas sobre sociología, hice ayudantías (hago),me he dado cuenta que necesito imperiosamente aprender inglés, quiero aprender alemán antes que inglés, terminé todos mis ramos sin echarme ningún curso, fui mediocre cuando las cosas no me interesaban (eso no ha cambiado nunca me parece), fui obsesivo cuando me sobreinteresaban, aprendí que cuando me gustaba alguien era mejor actuar que hablar... y aquí estoy, estoy bien, con la duda de si voy muy rapido o no, pero fueron 5 años, 5 años exactos, cinco años y un dia, como una condena de cárcel (¿saldrá de la cárcel alguien mañana lunes, luego de estar cinco años y un día?)... insisto, no se si voy rapido, pero si estoy seguro que se cerró un ciclo, probablemete uno de los mejores, uno que extrañaré bastante... ¿se cierra el blog? no sé, es como si formara y no formara parte del ciclo. Estoy nervioso, mañana (hoy) Lunes 12 de Marzo, cinco años y un día después de haber ido por primera vez a "clases" a la universidad empiezo a hacer clases. Exactamente cinco años después de mis primeras tres clases (8:30 Introducción a la Economía; 10:00 Introducción a la Sociología; 11:30 Introducción al pensamiento filosófico) hago mi primera clase... sociología de la sociología, al menos el nombre suena bien.

Inspiral Carpets - Saturn Five
Weezer - Island In The Sun
Yeah Yeah Yeahs - Turn Into
The Strokes - Hard To Explain
Sean Lenon - Parachute
Radiohead - Karma Police
Mono - Life In Mono
Daft Punk - Veridis Quo

creo que son las canciones que pueden decir algo al respecto.

martes, marzo 06, 2007

El final pt 1 y méxico

Miércoles 14 de Febrero del 2007

Ok, estaba, y estoy, pensando en cerrar esto. Fue entretenido, pero hace tiempo que no tenía ganas de reactualizarlo y estaba más preocupado de otras cosas. Sin embargo entre estas dos líneas que van escritas me decidí a que lo voy a dejar a la deriva y ver que sucede, en una de esas me dan ganas de escribir después, como las que me dieron ahora.

El asunto es el siguiente: todo está cambiando (suena a consigna adolescente), y yo estoy al medio. Por partes.

La universidad: terminé de escribir lo que empezó como tesis y terminó como seminario de grado. La diferencia son sólo 90 mil palabras de más o de menos dependiendo de dónde se mire. Me quedó buena, ahora sólo falta arreglar redacción, poner palabras políticamente correctas, disminuir la soberbia (aunque insisto, quedó bastante bueno… bueno, eso lo decidirán ellos) y agregar las referencias bibliográficas. Este último punto resulta ser el más problemático y engorroso. Ocurre que comencé el mes de Agosto conversando con “A” (el profesor guía), contándole que tenía una idea (la idea era similar pero venía desde hace muuuucho tiempo atrás) y el escuchándome y proponiéndome alternativas de trabajo. Primero empezó de forma tentativa, luego con una idea que llevé a un congreso, y a pesar de que tuvo “buena recepción” (los presentes recordarán) era un desastre. Seguí con el famoso modelo de metateoría y la autología, pero mientras más leía, me daba cuenta que eso no era lo que quería hacer, así que ahí me detuve y desde mediados de octubre hasta fines de noviembre no escribí nada. Entretanto salió lo del curso para este primer semestre, y me comprometí a estar listo para el primero de marzo, sin tener idea del cacho en el que me estaba metiendo. El punto fue que leí bastante, tomé muchos apuntes (la mayoría de ellos en mi cabeza), aclaré muchas dudas y ahora tengo que hacer referencia a ellas en el texto definitivo, y no recuerdo de dónde eran… veremos que pasa. Volviendo al proceso de escritura, retomé el 1 de diciembre con dos objetivos en mente, terminar el primer capítulo antes del 31 de diciembre, porque lo quería enviar a un libro. El 12 de diciembre y producto de todos los enredos que hubo en la universidad, se me abrió la posibilidad de hacer un seminario de grado, que en el fondo resultaba ser un artículo, y en vista de los tiempos con los que contaba me pareció la mejor opción. Nunca pensé que sería otro parto. En vista de que llevaba bastante avanzado me propuse entregar todo el 12 de enero, así tendría un verano decente [es importante indicar que disfruto mucho leyendo y escribiendo el tema que estoy trabajando, que no parezca que fue un sufrimiento eterno], es más, dije que para el 31 haría entrega de un borrador final y mataba dos pájaros de un tiro, enviaba ese borrador al libro y lo que entregaba en la u me lo leían y lo dejaba a punto antes de la entrega definitiva. Resultó que no alcancé a terminar, quedé fuera del libro y el borrador cuando lo acabé (cerca del 5 de enero) era un desastre que si lo entregaba corría serios riesgos de no aprobar con la nota mínima (un 5). El consejo fue: escribe todo de nuevo, desde cero. Nuevamente, consiguiendo más plazo para entregar, escribiendo, escribiendo y escribiendo, y a fines de enero (exactamente el 28) dio a luz el texto definitivo, “A” lo leyó y me dijo “ok, está listo, ahora hay que arreglarlo”, y en eso estoy. Entretanto la gente del libro dio más plazo, hasta mediados de febrero, así que también mantengo esa alternativa…

Sábado 24 de Febrero del 2007

Estoy en un punto de inflexión, no uno concentrado en minutos o segundos, es uno más largo, creo que concentrado en este verano, pero es inflexión en definitiva.

Ayer envié el articulo para el libro en una versión acabada en un 97%, sólo faltan esas insufribles correcciones finales en las que por más que uno lee y pone atención no encuentra ningún error por lo que es necesario darle algunos días. Tiempo tengo, me dije que lo entregaría el 07 de Marzo, las clases empiezan el 12 de Marzo, estaría cumpliendo con los plazos. Les envié copias a “V” y a “S”, ojalá tengan tiempo para darme una mano.

Hoy en la noche me voy a Ciudad de México, voy a un congreso sobre Niklas Luhmann, o como dice “C” (…y varios otros) a un bautizo…

[Por partes: Niklas Luhmann es un sociólogo alemán quien desde la universidad de Bielefeld desarrolló una de las propuestas teóricas más vanguardistas en sociología en lo que podríamos considerar teoría contemporánea. Luhmann comenzó con su proyecto teórico a fines de la década del 60, luego de estudiar algunos años con Parsons en la Universidad de Harvard. Desde esa época hasta su muerte (1998) Luhmann sostuvo importantes discusiones con los teóricos más importantes de los últimos años, aunque claramente su oposición constante se vio reflejada en la figura de Jürgen Habermas, sociólogo-filosofo (según le convenga para contestar alguna pregunta) siempre preocupado del ser humano y todas las causas políticamente correctas (es una caricatura, el hombre es un grande y cuando muera, si no lo conocen, lo conocerán porque deberían de hacerle muchos homenajes). El asunto es que Luhmann trabajó con una rigurosidad pocas veces vista, hasta publicar su obra cúlmine el año 1997: Die Gesellschaft der Gesellschaft. Paralelamente la recepción de su obra ha sido extraña, en Alemania se le sigue, pero no es una figura tan influyente y reconocida como Habermas, en Francia no lo miran ni por si acaso, en el mundo anglosajón europeo lo leen, pero de lejos, mientras que en Estados Unidos lo hacen de más lejos. Desconozco su difusión en Japón. Sin embargo en América Latina su recepción ha sido bastante grande. Difícil contestar a la pregunta de por qué ello es así. El asunto es que han traducido Die Gesellschaft der GesellschaftSociedad de la Sociedad, justo 10 años después de su muerte, el congreso da curso a ello. Reunieron a los mayores exponentes de la teoría en el mundo (aunque los grandes ausentes son Willke y Teubner), Alemania, Holanda, Italia, España, Brasil, Chile y México son los países de los expositores… ]

… cuando me enteré del congreso a mediados del año pasado inmediatamente me dieron ganas de ir. Evidentemente al poco tiempo de sacar cuentas me di cuenta que ello sería imposible. Sin embargo a mediados de diciembre “A” me dijo que tenía un beca que entregaban en México para que fuera al congreso y que me la quería dar a mi, la cual sería complementada por una beca similar entregada por la universidad acá. Yo dije ok, pero sin muchas ganas de ilusionarme, en el mejor de los casos ese dinero me alcanzaría para comprar los pasajes, pero necesitaba pagarme la estadía. En ese momento y de la nada aparecieron platas que jamás esperé (una ayudantía que yo creía era ad-honorem, un trabajo súbito de verano, y la venta de un teclado que llevaba meses vendiendo). El asunto es que tengo los pasajes, el pasaporte, la reserva en un hostal al lado del zócalo, muchas horas de google earth en el cuerpo observando ciudad de México.

Hasta ayer todo iba ok, hoy debo reconocer que estoy más nervioso, aunque no se por qué. No es la primera vez que salgo de Chile, no voy solo, no es la primera vez que ando en avión… pero me duele la guata, una suerte de colon irritable que por primera vez en mi vida me da. En fin, supongo que con el paso del día acabará.

La estadía será interesante, no son demasiados días, llego mañana domingo, el congreso empieza el lunes y termina el jueves, y el viernes en la noche vuelvo a Chile. Quiero tener tiempo para algunas cosas, probablemente algún día del congreso lo destine a ello: conocer el palacio de gobierno y las pinturas de diego de rivera, vi un libro de él y merecen la pena, el museo de antropología, la casa de León Trosky y comprar libros (son baratísimos). Paralelamente a ello deberé enfrentarme a una ciudad gigante, en los mails nos han dicho que para llegar al lugar del congreso nos demoraremos cerca de dos horas, y hay que llegar a eso de las 9 am, veremos como nos va…

Martes 06 de Marzo del 2007

(Primero que todo, sigue siendo Lunes porque aún no me voy a dormir) Ok, estoy de vuelta, para ser exactos llegué el sábado a eso de las 10 de la mañana. Fue sin dudas un viaje interesante, pero vayamos por partes.

Durante el día del vuelo mi nerviosismo no se detuvo, principalmente respondía a mi constante tendencia a manejar todas las variables y claramente en este caso ello no era así. Las únicas variables que manejaba eran el idioma y el dinero… del resto nada. Me despedí de Ambar, mis padres, mi hno. y su polola y unos tíos (creo que el cumpleaños de mi madre y mi hno. ese mismo día explica la presencia de tanta gente) y me adentré en policía internacional. Recorría el Dutty Free pensando en el reloj que no llevaba, sin embargo no encontré nada que me llamara la atención. Llegue hasta la puerta 10, la última, y esperé pacientemente. A eso de las 10:30 de la noche nos llamaron para subir al avión, esperé hasta al final y cuando ya no había cola me subí. Me tocó en la fila 14, ventana, lado izquierdo, sobre el ala. Ante la descripción para mi era todo bien, sin embargo el problema estaba en que no podía echar para atrás mi asiento ya que podía bloquear la salida de emergencias. El resultado fue evidente, una pésima noche, muy incómodo, en la que dormí nada y para cuando estuve totalmente despierto lo unico que tenía a la mano era una película protagonizada por “La Roca”, el hombre de la ceja de la wwf por el año 2001 (nuevamente, qué onda el tiempo) y un conocido rapero… en fin. Llegué a ciudad de México a eso de las 05 de la mañana, policía internacional, retiro de equipajes, aduana, todo ok. Salgo y comienzo a buscar mi nombre en uno de los carteles, el viernes había estado todo el día consiguiéndome un transfer para que me llevara al hostal, y había conseguido uno al módico precio de 44 dólares (algo así como 28mil pesos),ningún cartel con mi nombre; 05:30, tampoco; 06:00 habían menos carteles; 06:30 pregunté a los otros tipos de los carteles y nadie conocía a mi empresa, llamé al teléfono que tenían allá, pero evidentemente un domingo en la madrugada nadie me iba a atender; 07:00 finalmente me decidí a tomar un taxi… me cobró 6 mil pesos, me sentía completamente estafado, aunque agradecía haber decidido pagar el transfer a la vuelta.

Me acabo de dar cuenta que me da lata hacer una descripción del viaje. Iré a los puntos centrales. Ciudad de México es una ciudad genial. Lindos edificios, gente simpática, lugares interesantes. El problema está en la higiene, es realmente asquerosa. Toda la ciudad está cubierta por una capa de cebo de procedencia dudosa, lo cual hace que uno tenga un especial cuidado al momento de tocar algo. Es una ciudad barata, para comer, para dormir, para moverse, etc. Y es una ciudad con muchas cosas para hacer…

El congreso: sumamente interesante, hice contactos para estudios futuros, y me sirvió para obtener algunas certezas. El trabajo que hacemos en la universidad está bien hecho, el nivel de discusión teórico en mi círculo cercano es increíblemente elevado (en comparación con el mexicano), he recibido una educación de excelencia con profesores ídem, puedo ser un exegeta, pero lo evito y opto por la reflexividad.

Los lugares: el zócalo, plaza gigante… gigante… nada más que eso. Catedral de ciudad de México, es también gigante, está ladeada, es más interesante ver como hacen cola para entrar a las 7 am de un domingo que verla.

Palacio de Gobierno: impresionante, tiene unos murales increíbles pintados por Diego de Rivera, imperdible. Universidad Iberoamericana, si creen que PUC es cuica, esto es versalles. UNAM, tiene la belleza de la u de conce, pero 10 o 20 veces más grande (son 300mil alumnos), la combatividad de Gómez Millas, y deja hasta a un pragmático pensando en eso de la educación gratuita. Coyoacán, primera zona poblada por los españoles, en la actualidad es habitada por la intelectualidad acomodada del país… bello paseo, me faltó mas tiempo, aunque también es un imperdible.

Pormenores: me enfermé, tuve 39 de fiebre, dolor generalizado, me compré remedios, me salieron carísimos, y cuesta mucho encontrar una farmacia que no sea de las “Similares”… acá las conocemos como “Dr. Simi”…un fiasco.

Saldo positivo. Quejas, me faltaron más días.

Plastilina Mosh - Millonaire (algo de la zona)